Líneas Albies – Taxidermista

Marieta Rabieta tenía un curro que más de uno quisiera para sí: Jefa de Prensa Internacional de ARCO, la feria de arte contemporáneo de Madrid, la más importante de España y una de las más codiciadas de Europa. Pero los carcas rancios de IFEMA, la entidad gestora del parque ferial, le despidieron por “anarquista”. Spain is different.

Pablo Pómez tenía un curro que muy poca gente quisiera para sí: banquero. Se hartó de la corbata y los zapatos con cordones, y se piró [fíjate en el cartelito de “aplausos”, se acaba de iluminar].

En plena crisis económica, Marieta y Pablo decidieron marcharse a México DF, y en sus maletas se llevaron a uno de los grupos de la escena subterránea madrileña más sólido, original y divertido de los últimos diez años, Líneas Albies. O veinte, treinta, es igual, ellos se mueven en un terreno en el que no hay prácticamente nadie más. Y por qué lo bueno del rock español se nos va, dejándonos con toda la chusma musical –de verdad hacen falta nombres?-. Líneas Albies lo confesó de esta forma en un medio mexicano: “Madrid es más drogas, rock and roll y nosotros vivíamos en el centro neurológico. Todos los miércoles nos llamaban al timbre para la fiesta, era imposible trabajar. En DF, hay una tranquilidad que en Madrid no tengo. Madrid es una fiesta continua”.

Lineas

La música de Líneas Albies no se resume así de fácil. Ya han publicado tres álbumes, desde Confusión de 2004 hasta L.A. Rosa de 2012 –editado en tres EP’s distintos-, pasando por el que dejo para la escucha, Taxidermista (2007). Se dice que hay influencias de bandas como B-52’sDevo, Aviador Dro, Talking Heads, Pere Ubu, Gang of Four. Y la No Wave de principios de los 80’s. Yo añadiría Les Rita Mitsouko, en su época The No Comprendo a mediados de los 80’s. Post punk ácido, histérico, loco y alegre. ¡Madre mía cuánto talento tienen! Basta con escuchar la versión que hicieron del Sweeling Itching Brain de Devo, fabuloso cover irreverente de la banda más irreverente de finales de los 70’s. ¡Enorme! –también lo dejo para la escucha, good fiouck-.

Por cierto, les descubrí gracias a mi amigo Alberto Acinas –el pintor español con más talento del momento-, y que ahora también se ha marchado para DF. Otro gremio que nos deja, p… crisis.

 

 

 

Escucha entero Taxidermista, de Líneas Albies.

 

 

Devo – Q: Are We Not Men? A: We Are Devo!

Hubo una época en la que llevar una maceta de plástico rojo en la cabeza parecía lo más normal del mundo, vestirse con monos amarillos chillones no incendiaba las redes, y cantar sobre mongólicos no acarreaba un aluvión de denuncias políticamente correctas. Bendita época de libertad (que sí, estamos regresando, y mucho) ilustrada como nadie por Devo, el grupo más irreverente de finales de los 70s y principios de los 80s.

En la primera mitad de los 70s, una pandilla de amigos de la universidad de Akron (Ohio, la ciudad de los neumáticos) se interesa por la corriente “de-evolution” : no evolucionamos, regresamos. Es cierto que viviendo en los EEUU, cualquiera con dos dedos de frente debería llegar a esa misma conclusión.  Aún tomándosela a broma, el grupo monta primero espectáculos (ays estos conceptualistas) y luego actuaciones musicales. Los hermanos Mothersbaugh, los hermanos Casale, y Josh Freese (del que no se sabe si tenía hermano) adoptan definitivamente el nombre Devo y empiezan, allá por el 75 a alegrarle la vida a los autóctonos cansados, hasta que, bingo, nada menos que Bowie, Iggy Pop, Brian Eno y Robert Fripp les caigan encima mostrando interés por el tono de sus canciones.

devo

Reúnen los cuatro algo de dinerillo para producir el primer álbum de la banda, y se van todos a Colonia a grabarlo. Colonia, no es precisamente la alegría de la huerta, aún así, de los estudios alemanes sale en 78 el disco más loco, tarado y acelerado de la década, una mezcla jubilosa y gozosa de punk new wave.  “Q: Are we not men? A: We are Devo!”. Ahí está el no polémico «Mongoloid», ese grandioso “Gut Feeling” (con una intro que no para de acelerar hasta que te cueste seguirle el ritmo con tu dedo en la mesa, inténtalo), aquel infernal “Slap Your Mammy” (olvídate del dedo, no vas a poder), una versión sincopada e irreverente del “I can’t get no satisfaction” de los Stones, y un explosivo  “Uncontrollable Urge”.

Luego conocerán el éxito con su tercer álbum “Freedom of Choice”, pero la joya está aquí abajo. Hala, gracias Fiouck.