Todd Terje – It’s Album Time

Vivo un drama. Me estoy rompiendo en dos. Resulta que hace cuatro días se abrió a 100m de casa un nuevo local de una conocida marca de comida rápida. Vamos, sin nombrarla, la más conocida. A mi edad ya no hace falta convencerme de la m… comida que es. Menú Big Bazofia. Pero he de confesarlo, me chifla. Aunque nunca voy, a veces tengo un mono tremendo, así que ahora lo tengo muy complicado ya que por colmo trabajo desde casa. Total, no he aguantado más de cuatro días hasta tirar la toalla. Fui babeando a mediodía. Elegí lo de siempre –digo lo de siempre aunque la última vez hace más de cinco años-, la verdad es que me ha decepcionado un poco, tenía recuerdos realmente emocionados de aquello. Curiosamente me tocó sentarme al lado de una mesa de cuatro amigos hablando de música. De vez en cuando mencionaban grupos que me gustan, por lo que presté un poco de atención. De repente se pusieron a hablar de forma ditirámbica de un tipo del norte que no conocía –norte = Noruega-, un tal Todd Terje.

Sigue leyendo

Azealia Banks – 1991

¡Hoy servicio mínimo! Ya, yo también tengo derecho a un merecido descanso. Ya sé que estamos a dos de mayo y que el Día del Trabajo era ayer, pero yo escribo cada nuevo post el día anterior a su publicación. Con lo cual este que estás leyendo, lo escribí cuando seguías despatarrado en tu cama, babeando feliz por la victoria del Atlético. Como Presidente, Tesorero y único miembro de la asociación de “Estúpidos Estajanovistas de la Producción Bloggera”, he decretado que el día dos de mayo se adscribe a los de servicio mínimo. Hop. Y para celebrarlo, una copita de Rueda bien fresquito y un bombon, Azealia Banks.

Sigue leyendo

The Libertines – Up The Bracket

A principios de este siglo, la música tuvo como un hipo sonoro -con tufo a cerveza barata y vino en brick-, de estos que te sacuden todo el cuerpo y te sacan de tu sopor. Una ola de grupos rock a la antigua –léase cantante, guitarra(s), bajo y batería-, con las mejores intenciones del mundo, invadieron cascos y altavoces. Con los Strokes, Franz Ferdinand, Jets, White Stripes, Vines, Hives, Fioucks –queeeeeeé-, la década se avecinaba rock’n’roll y eléctrica, pero no duró, apostando la industria por grupos más facilones y sobre todo más vendedores, como Coldplay y Kaiser Chiefs. Dentro de esta avalancha de sonidos rabiosos, el que más dio de hablar fue sin duda The Libertines, y su loco chalao Pete Doherty.

Sigue leyendo