¡Hoy servicio mínimo! Ya, yo también tengo derecho a un merecido descanso. Ya sé que estamos a dos de mayo y que el Día del Trabajo era ayer, pero yo escribo cada nuevo post el día anterior a su publicación. Con lo cual este que estás leyendo, lo escribí cuando seguías despatarrado en tu cama, babeando feliz por la victoria del Atlético. Como Presidente, Tesorero y único miembro de la asociación de “Estúpidos Estajanovistas de la Producción Bloggera”, he decretado que el día dos de mayo se adscribe a los de servicio mínimo. Hop. Y para celebrarlo, una copita de Rueda bien fresquito y un bombon, Azealia Banks.

Buf, y qué bombon. Había visto su nombre por ahí en distintas publicaciones, pero o no tenía fotos el artículo, o iba yo sin gafas. Ays esta niña –veintitrés años-. Como no soy un loco del rap, no me había fijado en ella antes. Hasta dar ayer con el clip de su canción 212. Ojos risueños y boca pícara, cuerpazo de ébano, su rap electro gozoso fluye a la velocidad de la luz, original y talentoso. Además, Azealia, que no anda con tapujos, nunca se olvida de darlas un repaso a las cantantes RnB de turno, moviéndose y bailando como una reina eléctrica sin nunca parecer una actriz porno como las otras, Rihana & Co.

Te dejo con los cuatro temas que componían su primer EP, llamado 1991 –año de su nacimiento-, publicado en 2012; le valió premios, reconocimiento del gremio rapero y el despegue definitivo de una carrera que estuvo en entredicho durante algunos años. Desde entonces ha salido un primer álbum, Broke With Expensive Taste, después de casi dos años de gestación. Esta niña va a dar mucho que hablar, se le va con ganas de repartir soplamocos a diestro y siniestro a quien se ponga por delante. Mola. Y esta boca, ays…