The Motels – Careful

Vacaciones, día 2. Sol, mucho sol, no nos quejemos, lo hemos pedido a gritos durante tantos meses. Más recuerdos de veranos pasados y música intrínsecamente ligada a estos dos meses ociosos y perezosos. 1980, en plena ola new-wave, llega desde California el segundo álbum de The Motels, banda emblemática de este género, con Devo y B’52s. Me toca un verano tranquilo, un mes en Berlín -la Berlín de verdad, con el muro, los pasos fronterizos con control policiaco hasta de tus lecturas, el metro con estaciones en territorio este cerradas, una juventud inquieta y alegre a pesar de vivir en una carcel dorada, la cultura omnipresente, el rock y la música punk por todas partes- para seguir mejorando esta pesadilla de gramática. Y a finales de agosto, la recompensa de tanto bradwurst y schnaps nada más levantarte, paso algunos días en Nueva York en casa de mi hermana. Allí compro un artilugio del que todavía apenas se oía hablar en Europa: un walkman, de marca Panasonic más barato que el original de Sony-. Y tres cassettes para estrenarlo: Devo, B’52s y The Motels. Escuchar tus grupos favoritos del momento en cualquier lugar y momento fue de verdad una revolución.

The Motels

Y allí estaba yo, escuchando a Martha Davis paseando por Manhattan. Qué disco que aquel Careful, de The Motels. En 1980 la new wave propone un estilo musical más fresco que el rock y el post punk inglés. No pretende rehacer el mundo ni dar lecciones, celebra la alegria o la emoción del momento, punto. Martha Davis llevaba muchos años intentando levantar su grupo. Después de una primera etapa vana a principios de los 70’s, conoce a Jeff Jourard, guitarrista, con él que lo vuelve a intentar en 1978. Publican un primer disco, homónimo, con una portada icono de la época, repleto de canciones atemporales como Total Control, irrepetible lento en el que el erotismo de la voz de Martha Davis perturba a una generación masculina entera. Un disco del que venden millones de copias en todo el mundo, sobre todo en Europa y en Australia. El año siguiente, sacan Careful, con la misma receta. Detrás de una fachada alegre, las canciones cuentan historias emotivas y tristes de una América a punto de dotarse de una payasada de presidencia. Danger, Envy, Whose Problem, escucho una y otra vez el disco en mi walkman, susurrándome al oído la bella Martha Davis sus angustias a través de unos diminutos cascos que nadie cree capaz de restituir el sonido de un disco de vinilo, y yo mirando hacia arriba, esas torres gemelas tan brillantes…

Treinta y tres años han pasado. Puedo escuchar Motels y Careful sin avergonzarme, no han envejecido nada. Quien sí ha cambiado es la cantante, ha cogido un kilo por año, las fotos de hoy son crueles, era tan guapa…

 

Escucha Careful, de The Motels