Ja. Sabía que con este titular ibas a entrar. Claro que llama más la atención que Yves Montand y sus hojas muertas, o Sinead O’Connor, y su mala leche. ¿Verdad? Otra cosa es que te guste mantener sexo con ositos de verdad, oye, cada uno con sus fantasías, ahí no tengo nada que decir. Simplemente acuérdate que su madre se ha zampado a más de un pretendiente y amante de peluches con tanga. Yo sólo quería hablar de Yub Nub, la canción de los Ewoks. Claro que es una gilipollez. Es sólo que de vez en cuando necesito algo súper ligerito y muy tonto –por ejemplo el día del post sobre Lady KK-,  para ir adelante con el post del día.

Yo soy un Jedi de la música escrita. La fuerza está normalmente conmigo. Aunque es cierto que a veces flojea. No me sale, hasta me cuesta encontrar a quien publicar. Así que hace poco, empecé a constituir una “reserva” de artistas y discos para los días de vacas flacas. Hoy es uno de estos días. Por mi que mandaba el blog a paseo –lejos-, pero una apuesta idiota es una apuesta idiota. Total, este saco de las canciones para salir del paso contiene algunas ideas de posts tontas, que seguro me hacen perder la poca credibilidad que tengo; sé que alguno(a)s me van a mirar regulín. No pasa nadaaaaaa, quedan 570 ocasiones para yo volver a ser el bloggero de tus sueños. Aún sin ser peludo.

Los Ewoks tienen página en la wiki, sí señor. Y no cualquiera, una con scroll infinito. Es decir, de 7’49” en pantalla en el Retorno del Jedi –Episodio VI o lo que es lo mismo, el tercer episodio que viste en el cine de tener más de 40 años-, se han sacado una wiki con multitud de detalles físicos, sociológicos, políticos, culturales y demás. Te aviso, no hay nada sobre su sexualidad ni sobre los gustos culinarios de sus progenitoras. Por algo será. Viven en la luna forestal de Endor, miden un metro de altura –ya veo de qué va lo tuyo-, hablan como suaves y tiernos cretinos, cazan bichos raros y conducen Bordocks, hasta se cree saber que son ingeniosos, aunque primitivos. Pero de su sexualidad, sus costumbres en la alcoba de los árboles, sus técnicas tántricas, su ropa interior atractiva y sus lecturas lascivas, cero patato. Como salen en pantalla algunos cachorros, entendemos que no son curas –en el sentido puro de la palabra eh?-, pero más no sabremos. The Saint George Lucas Church se queda parca en info libidonosa.

Donde sí insiste, es en su capacidad a montar fiestas y bacanales. Cuando termina bien la cosa –en caso contrario terminan todos carbonizados-, por la noche encienden hogueras, sacan las mejores botellas, asan jabalíes durante horas –ays no, estos son otros-, desempolvan los instrumentos –tambores y cuernos esencialmente- y montan una que hasta cierto soldado imperial suele recordar años más tarde con bastante nostalgia –sobre todo la osita esa de los ojos azules, por lo visto el soldado tuvo más suerte que tú-. Tienen un himno, se llama Yub Nub, se la saben de memoria. Un hit que el Rolling Stones de Endor, en su edición del año 2.903, colocó en el #2 de su lista de las 10.000 canciones más importantes del milenario. Justo detrás de una vieja canción de 1976, God Save The Queen, de The Sex Pistols.

Oye, te avisé que habrá días así.