Ann Chase – A Chant For Your Plants

De vez en cuando me gusta publicar algún post chorra, sobre un artista de verdad imposible; me gustan aquellos que en su día pasaron totalmente desapercibidos y con nula probabilidad de que de repente se les conozca por su discografía. Ni después de un post en undia-undisco.net, tanto poder no tengo. Por lógica, resulta imposible saber cuántos son. ¿Cuántos de estos simpáticos chalados han soñado con tener una carrera musical meritoria, sabiendo que su producción se lo iba a impedir? Miles, seguramente. Así que, cuando el Tio Fiouck da con un digno representante del gremio de los “Músicos Malditos”, no dudes que enseguida te lo sirve en bandeja. Como hoy, Ann Chase; golpe bajo.

¿Cómo he descubierto a esta Señora, cantante verde por excelencia? El azar, como siempre. Andaba buscando una canción para ilustrar una noticia que había leído, muy interesante, sobre la producción casera de cannabis en Francia. Es que se está disparando, literalmente. Como en el fondo no hay mucha diferencia entre el país vecino y aquí, supongo que España estará ante el mismo fenómeno. No pretendo valorar si es bueno o malo, yo dejé el tabaco hace diez años, así que imagínate si los cigarros LP ni me van ni me vienen.

Resulta que la policía no da abasto, cada semana descubren nuevas plantaciones caseras, algunas de bastante envergadura. No hablo de fumadores que sustituyen los geranios de la abuela por cuatro o cinco pies de maría, no, hablo de personas que cultivan cientos de ellos. Descartemos a esta inmensa mayoría que cultiva lo que se va a fumar en el año -contando con que de vez en cuando van a irrumpir en casa amigos que no veían desde pre-escolar-, que lo hacen para estar seguro de la calidad, para no mantener a los narcos, para no tener que contactar con camellos y porque, bien hay que decirlo, es una planta sumamente bonita.

chant plants

Otros pocos ven en ello un pequeño negocio, para llegar a fin de mes más tranquilamente. El paro que dura, la jubilación que no da para muchas alegrías; uno de los pocos aspectos positivos de una crisis que despierta dotes de herbolarios amateurs. El cálculo es rápido, en un metro cuadrado pueden crecer cinco pies que producen hasta treinta gramos, cuatros veces al año. A ocho euros el gramo –precio parisino, no tengo ni idea aquí-, son 5.000 euros los que te embolsas al año de vender toda tu producción. Algunos lo han entendido mejor que nadie, son los vietnamitas de París, se han convertido en pocos años en los amos del cannabis casero, sustituyendo poco a poco al narco de toda la vida, aquel chico malo que sale en las películas. Será más simpático el vietnamita con plantador de bulbos y sembradora de mano que el colombiano con habano y sonrisa fría?

Ann Chase, volvamos a Ann Chase. De esta «cantante» no se sabe apenas nada, menos que en la foto de su vinilo se parece a Jamie Lee Curtis en Mentiras Arriesgadas. Esta señora vivió una auténtica pasión por las plantas, hasta el punto de dedicarle un disco, allá por los 70’s. En 1976, reinterpretó a su manera –guitarra acústica y flauta- la obra de Erik Satie, Gymnopédie Nº 1, añadiendo una letra apasionada en la que habla de su amor por las plantas. Pequeño vistazo a su prosa, ni en Eurovisión se ha caído tan bajo: “Quiero ser una célula trémula desde las extremidades de tus raíces sensibles, con el fin de probar tu verdad. En este instante, me siento rodeada por millones de tus alveolos, húmeda de tu savia, vibrando a tu ritmo”. Casi cósmica y orgásmica la verdad. Yo creo saber con qué planta tenía relaciones esta señora. Pero no llamaré a la policía.

 

 

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s