Lionel Richie es un “copiar/pegar mix” de muchos cantantes a la vez. Pop a lo Michael Jackson, soul como Marvin Gaye, R’n’B estilo Stevie Wonder, y sabor dulzón tipo Barry White. Es complicado atribuirle un estilo propio, y lo poco que se había ganado en su época dorada se va borrando a medida que van desapareciendo sus originales –de los cuatro ya sólo queda Stevie Wonder-. Debió pararse en plena gloria, cuando vendía discos como churros, ahora sería medio mito, como muchos. Porque discos ha vendido como muy pocos en la historia de la música popular, se habla de más de 100 millones de copias. Los números bailan –all night long– de una fuente a otra, en todo caso es un super seller. Chapeau.
A mediados de los 60’s, Lionel Richie estudia medicina en Alabama, es buen estudiante y va para médico, tal como querían sus padres. Todos los padres quieren que sus hijos sean médicos –o profesores-, y cuando un retoño anuncia que quiere ser artista, se arma la gorda en casa. Por lo menos hasta que empieza a vender, que luego ya son todo alabanzas. Ja. Padres, sólo hay dos. Eso le pasó a Lionel Richie. En 1968, lo dejó todo para cantar, al frente de The Commodores. Por suerte para él, no tardaron mucho en convertirse en una banda conocida. En 1971 firman con el sello Atlantic y se convierten de un día para el otro en teloneros de nada menos que los Jackson Five. Sííí, con el chiquitín y su bola de pelo a los 118 11. Hacen una música soul funk, bailable, facilona. Encadenan las canciones con cierto éxito, Machine Gun –instrumental-, Easy –versioneada en 1993 por Faith No More-, Still, Brick House, Three Times A Lady. Pero Lionel se aburre, y siente que le iría mejor en solitario. Se separa del grupo y empieza a componer para otros. En 1980, escribe el tema Lady, para Kenny Rogers, tremendo hit del 1980 que Billboard incluirá años más tarde en el #47 de su ranking All Time Top 100. Más empalagosa imposible. EL año siguiente escribe, compone y co-interpreta con Diana Ross la canción Endless Love –BSO de la película del mismo nombre, de Zeffirelli, con Brooke Shields-. Más empalagosa imposible. El Richie está lanzado, en 1982 publica su primer álbum solo, llamado como él. Pum Pa, cuatro millones de copias vendidas para un álbum que contenía nada menos que tres hits: Truly –más empalagosa imposible-, You are y My Love.
Y llega 1983. Año de Michael Jackson, con Thriller. Año de Bowie, con Let’s Dance. Y Año de Lionel Richie, con Can’t slow down. Por dónde empezar? El álbum recibe el Grammy award al mejor disco en la edición 1985. Ha vendido veinte millones de copias. Y todo por una canción, All Night Long. Nada empalagosa, tan sólo alegre, increíblemente alegre. Es sin duda su mayor éxito. Se quedó arriba de los charts cuatro semanas seguidas en tres listas Billboard distintas –pop, R’n’B y adult temporary, vete tú a saber WTF es esta lista, huele a sexo verdad?-, figura en el #76 de las 100 mejores canciones de los últimos cincuenta años, la interpretó por sorpresa –todo el mundo esperaba al chiquitin 118 11- en la ceremonia de clausura de los JJOO de L.A. en 1984. Tiene el dudoso honor de haber sido escuchada por los soldados yankies en las calles de Bagdad durante la invasión de Irak en 2003, y ha sido interpretada en una sola noche 158 veces seguidas por una pareja de amigos el año pasado –se puede ver una versión resumida aquí, es simpática la hazaña-. El vídeo de All Night Long es del peor estilo ochentera posible, Lionel Richie tiene un look penoso con estos bigotes leather gay, los bailarines visten hortera, pero qué más da, FIESTA FOR EVER! Y a mi me encantaaaa!!!
Escucha entero Can’t Slow Down, de Lionel Richie
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