La creencia popular dice que comerlo es euforizante. Contiene teobromina, que se utiliza como diurético, vasodilatador y cardioestimulante. También tiene efectos beneficiosos sobre el sistema circulatorio, previene la tos, es antidiarreico, y se ha sugerido que podía ser bueno como anti-cáncer así como estimulante cerebral, mientras que algunos estudios apuntan que con las moléculas de flavonoles del cacao se podrían sacar medicamentos para luchar con la diabetes y algunas clases de demencia. Ah, también dicen que es afrodisiaco.
No será todo oro lo que reluce, pero coño, el chocolate es un crack. Debería de tener una estatua en la entrada de la ONU –financiada por los suizos, los mayores consumidores de chocolate en el mundo-.
No como esta banda indie rock canadiense de Montreal, que de momento no se merece mucho más que una entrada diminuta en este blog. No por nada, pero he pasado parte de la tarde comiendo chocolate de diversas formas, y como que termina pesando.
Te dejo con cuatro temas del segundo disco del grupo, Tss Tss, que se acaba de estrenar. Habían empezado bien con su primer álbum, Piano Elegant, pero de ello hace siete años, un tiempo más que suficiente para que los fans de la primera hora se olviden de ellos. Cosa que hicieron tan alegremente, como yo.
Venga, sube el volumen, luego zumito y a misa, que hay mousse para comer.