Desde el sublime Réquiem secular de Gabriel Fauré del post de ayer, hasta el genial rock abrasivo de Findlay de hoy, qué diferencia fundamental hay? No hablo de música en sí, es obvia. Hablo de… qué hace que, en 2013, seguimos deleitándonos con una obra 125 años después, cuando nos invade la más que razonable duda sobre si en 2138 se seguirá bailando al son de Off&On, himno garage de Nathalie Findlay, último ícono de la escena rock londinense, inagotable cantera de talentos eléctricos y rabiosos.
Llevaba cierto tiempo queriendo publicar a esta chavala, Findlay, figura rock’n’roll femenina de un Londres que nunca termina de renovarse. Gloriosa ciudad esta que nos regurgita a diario bandas con un sonido que ni en treinta años habremos escuchado aquí, y sin que se haya publicado ni dos líneas en internet para presentarla.
Así que no te digo más, ni que en sus vídeos le gusta salir con sujetador y bragas sexys, que te vas a distraer y esto no importa, importa el rock que hace, por dios, es salvaje, es esencial. Rock’n’roll, Findlay.
Escucha la última perla rock londinense, Findlay